Infancia y adolescencia

La Infancia

"Cuando nace un niño nace la esperanza de un mejor mundo, la esperanza se pierde cuando los padres no lo saben educar."

Ser niño, es ser puro.
Ser niño, es aceptar informacion.

Ser niño, es no preocuparse por el futuro. 
Ser niño, es no entender la inmadurez de los mayores. 
Ser niño, es jugar a intentar ser adulto. 
Ser niño, es aprender de todo sin saber que hay errores. 
Ser niño, es tomar la vida sin prisa. 
Ser niño, es vivir la vida y no saber que es un instante. 
Ser niño, es encontrarle a todo una sonrisa. 
Ser niño, es siempre esconderse y nunca encontrarse. 
Ser niño, es hacer travesuras y no pedir disculpas. 

Ser niño, es ser inocente.

Ser niño, es ser el destino de este mundo.

Así como dice Sigmund Freud: “La infancia es Destino”,  es decir la infancia es lo que te lleva hacer la persona lo que es en la vida adulta.

Marcos 10:15  En verdad os digo: el que no reciba el reino de Dios como un niño, no entrará en él.Cada persona no importa lo madura y adulta que sea deber ser un niño.¿Y qué significa esto?No es que volvamos a los pañales y borrar todas nuestras experiencias de vida.Significa que seamos esponjas como los niños,  es decir, que recibamos el mensaje, lo pongamos en práctica y que nos cambie la vida.

La Adolescencia

"La adolescencia es el momento para vivir y experimentar la vida antes de la monotonía de la adultez."

Ser adolecente, es tomar decisiones que marcaran su vida.
Ser adolecente, es preocuparse por lo que le traerá el futuro.
Ser adolecente, es disfrutar la vida.
Ser adolecente, es empezar a entender las responsabilidades.’
Ser adolecente, es enamorarse por primera vez.
Ser adolecente, es tener su primera decepción.
Ser adolecente, es vivir el momento.
Ser adolecente, es empezar a tener sueños.
Ser adolecente, es dejar las cosas para lo último.
Ser adolecente, es pelear por algo sin sentido.
Ser adolecente, es pensar que el mundo está contra ellos cuando de hecho es el único momento para ellos.
 Una de las principales tareas de la adolescencia es conseguir una identidad, no necesariamente un conocimiento de quienes somos, sino una clarificación de lo que podríamos llegar a ser.